Como consecuencia del daño que sufrió el puente sobre la quebrada Guairí por las intensas lluvias, se mantiene cerrada la vía Bucaramanga–Bogotá.
En el puente, ubicado cerca al municipio de Oiba, a la altura del kilómetro 68, están represados más de 200 vehículos entre camiones, tracto mulas y buses de transporte intermunicipal.
Por las complicaciones ocasionadas por las lluvias de las últimas horas, las autoridades de Santander afirmaron que esta vía podría estar cerrada durante tres días más para vehículos de carga pesada.
De acuerdo con la directiva, hay profundización y sedimentación en ese sector, lo que dificultará los trabajos de reparación de ahí que se tenga que restringir al máximo la circulación vehicular pesada.
Dijo que se intervendrá de manera rápida y se trabajará las 24 horas con el ánimo de dar vía lo más pronto posible.
Este puente ha venido presentando problemas desde la primera ola invernal que se vive en el país.